* En la casa del adulto mayor, recibe alimento, cobija y techo
Por Mauro Moreno Campos/Astronoticias
Para Ramiro Villasana, la vida no le ofrecia más allá que deambular de plaza en plaza, comer lo que manos piadosas le daban, en su ropa se guardaba el sudor, las heces y la suciedad que le hacian despedir una fetidez que alejaba a todo mundo, a su alrededor, solo sus amigos de calle que toman la plaza pública como su casa, le soportaban, se contaban sus anécdotas, sus vivencias, sus amores y desamores, el abandono en que por motivos desconocidos los tienen sus familiar.
El uno de julio, una nuevo giro en su vida, llegó cuando menos lo esperaba, cuando al gatear por la plancha de la plaza principal, llamó la atención de algunos, que a su manera le ayudaron, mientras que una inmensa mayoria, desde un teléfono, mentaban madres.
Reporteros de Astronoticias, acudieron este pasado viernes a la casa hogar del adulto mayor, para conocer del destino de don Ramiro Villasana, pero no nos permitieron la entrada, solo con un permiso especial, el que desde hace dias hemos tratado de obtener pero sin resultado, para los reporteros de esta casa editora.
A los lejos, desde la puerta principal nos dejaron ver a don Ramiro, enfundado en una camiseta roja, a un costado del área central donde todos los abuelitos conviven, platican, juegan y se toman sus medicinas en caso necesario.
Allí está, ya ha aguantado medio mes, y esperemos que por su bién siga como hasta hoy, por su salud, por su bienestar y porque lo merece, bién por don Ramiro
