En tarjetas se incrementaron 1.4 millones de agosto del 2021 a agosto del 2022. Aunque en menor proporción, también se ven en nómina y personales.
Si bien la morosidad de la cartera de consumo de la banca comercial se mantiene baja y estable -2.89% a octubre pasado- el número de retrasos de pagos por parte de los clientes, ha crecido, principalmente en el producto de tarjetas de crédito.
Un análisis de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) destaca que a agosto del 2022, había un total de 27.5 millones de tarjetas de crédito activas, cifra superior a las 25.3 millones del mismo mes del 2021.
Precisa que las que estaban con pagos vigentes (es decir, sin ningún atraso) eran 24.7 millones.
No obstante, las que registraban atraso, es decir, de 1 a 3 impagos consecutivos, eran 2.38 millones, lo que representó 1.4 millones más que las 988,000 que se encontraron en dicha situación en agosto del 2021.
En contraparte, las que estaban vencidas, con un retraso de más de cuatro pagos, bajaron de 496,000 en agosto del 2021, a a 419,000 en agosto del 2022, una reducción de 77,000.
En cuanto al saldo en tarjetas de crédito que registraban atrasos, este fue de 44,700 millones de pesos (contra un total de 363,000 millones del portafolio), un aumento de 28,700 millones en comparación con los 16,000 millones de agosto del 2021.
En tanto el saldo vencido tuvo una disminución de 9,700 millones de pesos a 8,300 millones en el periodo. El Índice de Morosidad (IMOR) de las tarjetas de crédito de la banca se ubicó en 2.67% en octubre pasado.
En lo referente a los créditos de nómina, el documento de Condusef detalla que a agosto del 2022 había 5.3 millones de préstamos de este tipo por parte de la banca, de los cuales 4.9 millones estaban vigentes.
No obstante, el número de créditos atrasados en pagos, subió de 220,000 a 306,000, es decir, 86,000 créditos más en el periodo; mientras que los vencidos pasaron de 93,000 a 121,000.
En cuanto al saldo atrasado en los créditos de nómina, subió de 10,450 millones de pesos a 15,700 (contra un total de este portafolio de 307,800 millones), es decir, un incremento de 5,250 millones; y el vencido pasó de 5,400 millones a 7,350 millones. Aquí el IMOR fue de 3.02% en octubre.
Y en lo que se refiere a los créditos personales, el análisis de Condusef señala que a agosto del 2022 había un total de 13.1 millones activos, de los cuales 10.2 millones estaban vigentes, es decir, sin ningún tipo de atraso.
Los que registraron atraso subieron de 2.0 millones en agosto del 2021, a 2.2 millones en el mismo mes del 2022; mientras que los vencidos se mantuvieron relativamente estables con 658,000 y 687,000 respectivamente.
En cuanto al saldo con atraso en créditos personales, creció de 16,650 millones de pesos en agosto del 2021 a 20,400 millones, un alza de 3,850 millones; y el vencido se ubicó en 8,400 millones.
Reflejo del alza de tasas
En su análisis, la Condusef explica que dicha situación muestra en cierto sentido, que el aumento en la tasa de interés, como resultado de que la de referencia del Banco de México (Banxico) se ha venido elevando, empieza a presionar la liquidez de los usuarios de tarjetas de crédito.
“El otro tema importante, es el aumento de la inflación, que erosiona los ingresos disponibles de las familias”, enfatiza.