Luis Eduardo González Cepeda, el presidente de la Unión Mexicana de Fabricantes y Formuladores de Agroquímicos (UMFFAAC), insistió en que es necesario apoyar al sector agrícola nacional.
El Gobierno federal no ha dado atención a los productores de maíz, trigo y sorgo del país, quienes llevan más de 4 meses solicitando que se fije un precio de garantía que permita contrarrestar la caída de los precios.
Así lo manifestaron representantes de productores de más de 20 estados del país, entre ellos Sinaloa, Baja California, Chihuahua, Michoacán, Zacatecas, Guanajuato, Guerrero y Tamaulipas, quienes acudieron a las afueras de Palacio Nacional para exigir al presidente Andrés Manuel López Obrador un precio de garantía para el trigo de 8,000 pesos por tonelada y 7,000 pesos para la tonelada de maíz, luego de contingencia de mercado tras la caída de precios en la Bolsa de Chicago.
Integrantes del Frente Nacional por el Rescate del Campo Mexicano, que agrupa a productores de más de 20 estados y que fue anunciado este martes frente a Palacio Nacional, advirtieron que esta situación “refleja la falta de apoyos del gobierno para impulsar la producción agrícola”.
En entrevista, Luis Eduardo González Cepeda, el presidente de la Unión Mexicana de Fabricantes y Formuladores de Agroquímicos (UMFFAAC), dijo que es necesario apoyar al sector agrícola nacional, no sólo porque el valor de la tonelada ha disminuido, sino porque la producción de maíz blanco en México se desplomó en un millón 143,856 toneladas en un año, al pasar de 24 millones 235 mil 821.46 toneladas en 2021 a 23 millones 91 mil 964.74 toneladas en 2022, “cifra que de continuar con la crisis actual, representará un problema histórico en nuestro país”, afirmó.
Destacó que las demandas de los agricultores que acudieron a Palacio Nacional este martes, no son un tema político sino de justicia, donde el agricultor debe ser el actor principal en el desarrollo económico del país.
Resaltó que el desplome de la producción de maíz blanco, y en general de maíz, que se registró el año pasado, amenaza con extenderse a otros granos por la falta de apoyos a los campesinos y la poca rentabilidad de los cultivos que los está orillando a abandonar el trabajo en el campo.
Esta administración, dijo, no ha hecho nada por ayudarles, por acercarles las tecnologías o enseñarles a ser parte del sistema comercial y los están dejando solos ante esta crisis del campo que puede hundir la economía de este país, ya que tendríamos que importar una gran cantidad de alimentos.
En tanto, el presidente de la Asociación de Organismos Agrícolas del Sur de Sonora A.C. (AOASS), Álvaro Bours Cabrera, señaló que “lo que nos urge es un apoyo emergente para los tres granos básicos, que son: trigo, maíz y sorgo”.
El líder campesino aseguró que “de no haber un apoyo a los productores de todo el país caeríamos en cartera vencida y no seríamos capaces de pagar nuestros compromisos financieros, peligra de verdad la producción nacional de trigo, maíz y sorgo”.
Por su parte, Rogelio García-Moreno, presidente de la Unión Agrícola Regional del Norte de Tamaulipas, dijo que el gobierno tiene una responsabilidad enorme donde tiene que voltear a ver al campo productor de granos en este país.
García Moreno destacó que en la Ley de Desarrollo Rural se contempla perfectamente y muy claro que el gobierno tiene la responsabilidad y la obligación de cuidar a sus productores de todos los tamaños que hay en el país.
Señaló que el presidente de la República tiene que dar una solución de manera responsable y educada a todos los productores de nuestro país.
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