– Ramón Cano Manilla, que dió altura al Mante a nivel nacional e internacional, mora en modesta tumba
Por Mauro Moreno Campos/Astronoticias
Nacido en 1888 en el puerto de Veracruz, el pintor Ramón Cano Manilla, que en sus años mozos llegó a trabajar de jornalero, arriero y de herrador, se formó en la llamada escuela mexicana de arte, viajando a México donde se inscribió en la Academia de San Carlos, llegando su obra a tener alcance mundial al ser exhibida en el museo de arte de Madrid y en la feria Internacional de Sevilla, para 1948, se trasladó a Ciudad Mante Tamaulipas, donde dejó a varios alumnos encaminados en el arte de la pintura.
Fue contemporáneo de David Alfaro Siquerios, de Rufino Tamayo, Jose Clemente Orozco, entre otros, incluso tuvo amistad con Diego Rivera y fue maestro de Frida Kahlo, ya en 1993 el Globo, una de sus creaciones fue seleccionada como portada en los libros de texto gratuitos.
Su muerte en Ciudad Mante Tamaulipas donde pasó gran parte de su vida ocurrió, según algunos historiadores en Octubre y otros el primero de diciembre del año de 1974, dejando mas de 500 metros de murales que aún subsisten en las escuelas Hector Pérez Martinez y la Secundaria Técnica dos.
Una modesta tumba, en el panteón municipal uno, donde solo su familia y algunos ex alumnos acuden a depositar flores, guarda los restos de este destacado artista, a quién el Mante debe mucho en proyección y en el impulso al arte.