Los animales domésticos como perros y gatos pueden sufrir golpes de calor: ayúdalos a mantenerse frescos.
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Por The Conversation
A medida que las temperaturas alcanzan niveles insoportables, es probable que las mascotas tengan problemas para lidiar con el calor. A continuación le explicamos cómo mantenerlas a salvo.
Europa y Estados Unidos han registrado altas temperaturas estos últimos días, una situación que ocurre también en los estados del norte de México.
Los animales que se encuentran en una jaula o madriguera pueden tener dificultades para escapar del calor cuando el sol se mueve por el jardín, por lo que puede ser necesario trasladarlos o crearles una sombra. Aunque los gatos pueden salir a la calle, a menudo se meten en edificios como invernaderos y cobertizos. Si se quedan encerrados, el riesgo de insolación es alto, así que comprueba siempre si hay gatos en garajes antes de cerrarlos por la noche.
En el caso de los animales domésticos que pueden salir al exterior, como los gatos y los perros, procura proporcionarles lugares frescos y con sombra para que se echen. Y asegúrate de que todas las mascotas tengan acceso a agua fresca para que puedan mantenerse hidratadas. Proporcionar zonas con agua para que las mascotas se tumben o jueguen también puede ser una buena forma de ayudarlas a mantenerse frescas.
Otras formas de ayudar a los animales a sobrellevar la situación son ofrecerles superficies frescas para echarse una siesta y darles postres congelados o fríos para que estén cómodos y entretenidos. Los ventiladores y el aire acondicionado son otra buena forma de mantenerlos frescos.
Paseos matutinos
Aunque algunos perros mueren dentro de coches que pasan mucho tiempo bajo el sol, son muchos más los que sufren golpes de calor paseando durante las horas más calurosas. Por esta razón, cuando haga calor, mantén el nivel de actividad al mínimo y saca a tus perritos a pasear solo en las horas más frescas del día.
Pasear a los canes suele ser más seguro a primera hora de la mañana y, en la medida de lo posible, si se hace por zonas sombreadas con acceso a agua. Si no hay agua disponible en el camino, intente llevarla consigo. Las sesiones de adiestramiento y los comederos de rompecabezas (dispositivos que liberan comida una vez que la mascota ha resuelto el rompecabezas) pueden ser una buena forma de cansar a los perros cuando hace demasiado calor como para salir al exterior con seguridad.
Más del 50 por ciento de los perros que son llevados al veterinario con un golpe de calor grave mueren. Así que el consejo es: en caso de duda, no los saques a la calle.
Cualquier mascota corre el riesgo de sufrir un golpe de calor en un coche demasiado caliente. Si viajas con tu mascota, piensa en cómo mantenerla fresca tanto durante el viaje como en caso de atasco en el tráfico o una avería. Reduzce los viajes al mínimo, pero si tienes que transportar a tu mascota, no la dejes nunca sin vigilancia. Asegúrate de que tenga agua, sombra y aire acondicionado siempre que sea posible.
Aunque los animales de edad avanzada y con sobrepeso corren más riesgo de sufrir un golpe de calor, cualquiera puede verse afectado. Y recuerda que los animales con caras planas, como los bulldogs franceses, los gatos con cara plana y los conejos tienen un mayor riesgo de sufrir un golpe de calor.
Importancia del tratamiento temprano en mascotas
Si tu mascota desarrolla signos de insolación, el tratamiento rápido es clave, así que vigila regularmente a tus compañeros y compañeras animales cuando haga calor.
Al principio, cualquier mascota con un golpe de calor jadeará y respirará más rápidamente. También pueden cansarse, tambalearse al caminar o carecer de energía para moverse. Si no se tratan sus síntomas, esto puede progresar a diarrea, vómitos, adaptación, colapso y pérdida de conciencia. En este punto, el riesgo de muerte aumenta significativamente.
Actúa rápidamente si crees que tu mascota está padeciendo un golpe de calor. La mejor manera de reducir la temperatura corporal es enfriar rápidamente al animal. Empieza por alejarlo de la fuente de calor, llevándolo a la sombra y a una superficie fresca. En una verdadera emergencia, es necesario enfriarlos con agua.
Echa agua sobre ellos, cualquier agua que esté a tu alcance, ya sea agua del grifo, agua embotellada o de una piscina infantil. Si ha perdido el conocimiento, asegúrate de que su cabeza se mantiene fuera del líquido.
Evita cubrir a tu mascota, tampoco con toallas mojadas, ya que las toallas pueden actuar como aislantes. Y acude lo antes posible a una clínica veterinaria, ya que los retrasos en el tratamiento pueden resultar mortales.
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*Escrito por Anne Carter, especialista en Biología Animal; Dan O’Neil, profesor asociado de Epidemiología en Animales de Compañía; y Emily J. Hall, especialista en Educación Veterinaria.
*The Conversation es una fuente independiente y sin fines de lucro de noticias, análisis y comentarios de expertos académicos.
